Review Gigabyte MA785GPMT-UD2H

Luego de semanas en nuestros laboratorios dándole duro a placas madres Intel P55,  volvemos al lado verde con la Gigabyte MA785GPMT-UD2H, una de las primeras ofertas con el chipset AMD 785G, que incluye como novedad gráficos integrados Radeon HD 4200 y un factor de forma bajo el estándard micro-ATX. Si quieres saber como rinde esta placa y el chipset, no te pierdas este review cortesía de MadBoxpc.

Esta placa se basa en el chipset 785G de AMD incluyendo una Radeon HD4200 a cargo de los gráficos. No los aburriré hablándoles del chipset ya que Marioace preparó un excelente artículo al respecto, asi que en sólo veremos el respectivo diagrama del chipset y luego los invitamos a pasar a la  siguiente página para conocer más de cerca a la placa que nos ofrece Gigabyte.

Estéticamente estamos ante uno de los clásicos de Gigabyte, con tonos azules predominando tanto el PCB como el cooler y conectores principales. De tamaño mATX vemos que no tiene nada que envidiarle a una placa de tamaño completo al integrar 5 puertos SATA, dos PCI,  un PCIe x16, un PCIe x1, cuatro slots para memorias DDR3 y un diseño de 4+1 fases de poder (4 para CPU y 1 para memorias). Afortunadamente el área alrededor del procesador está muy limpia y despejada, lo que nos permitió instalar sin problema alguno una gran cantidad de coolers.

La parte trasera nos entrega salidas de vídeo a través de los puertos VGA, DVI y HDMI para que no tengas dispositivo que no puedas enchufar. Seis puertos USB, un conector FireWire y un puerto eSATA le dan la conectividad al panel de E/S. El audio de ocho canales se complementa con una salida óptica y el puerto Gigabit Ethernet nos mantendrá conectados las 24 horas. El conector combinado para teclado o mouse Ps2 nos salvará de más de una emergencia y se agradece para los que estamos encariñados con esos teclados casi tan viejos como nosotros.

Si bien la placa no se queda atrás en características, sí se queda atrás en diseño, ya que los cinco puertos SATA de la placa quedan bloqueados con una VGA medianamente grande como una GTS 250 o GTX260. Es cierto que con un poco de fuerza puedes acceder a dos de los puertos en la placa, pero si llegas a tener problemas de garantía las probabilidades de que la tienda donde compraste tu hardware te quiera negar la garantía porque «abusaron físicamente» de la placa son altas. Aprovechamos de ver al southbridge SB710 al desnudo y los headers para los conectores USB, 1394 y gabinete.

Bajo el vistoso cooler azul/grafito encontramos al mítico northbridge AMD 785G junto al chip de memoria (SidePort) que le da autonomía total a la Radeon HD4200 que el sistema tiene a bordo. Veamos qué tal es la BIOS de este juguetito.

No vamos a mostrar todos y cada uno de los menús de la BIOS, pero quienes deseen overclockear tendrán opciones hasta aburrirse. Se pueden cambiar tanto las velocidades como voltajes del procesador, memorias y chipset sin problema alguno y la BIOS se siente lo suficientemente sólida en términos de opciones comparadas con otras opciones del mercado que están en los MBPC Labs.

Plataforma de Pruebas y Metodología.

La plataforma de pruebas fue la siguiente:
Usamos en hardware:

• CPU AMD Phenom II x4 965 BE
• RAM CSX Diablo DDR3 @ 1333 MHz (8-8-8-20)
• MB ECS A790GXM-AD3
• HDD Seagate 7200.10 250GB
• PSU Topower M2 Special Edition 600W Active PFC

Y en software

• Windows Vista Ultimate SP1 x64
• AMD Catalyst 9.11
• PCMark Vantage 1.0.0 (november hotfix) 64 bit
• SiSoft Sandra 2009 SP3 R1596
• Cinebench R10 64 bit
• Virtual Dub v1.8.0 usando codec DivX 6.8
• PovRay v3.7 beta 32 64 bit
• Photoshop CS4 64 bit
• COD 5 v1.7
• Borderlands 1.0
• ScienceMark 2.0
• 3DMark Vantage 1.0.1
• Call of Duty: World at War v1.5
• Mirror’s Edge v1.01
• Tombraider: Underworld v1.1

Metodología
La metodología utilizada en este review es exactamente la misma que utilizamos en los reviews de placas madres y/o de CPUs que hemos realizado anteriormente. Solamente actualizamos algunas versiones de programas para mantener los resultados lo más frescos posible.

Todas las pruebas fueron ejecutadas 4 veces, indicando como valor final y presentado el promedio estable de las corridas. El sistema se mantuvo bajo sus condiciones stock en todo momento, se deshabilitó Cool&Quiet, SpeedStep y NVIDIA PhysX.

Para la prueba de codificado de video SD se utilizó la película “Pirates of Silicon Valley” con el codec DivX 6.8, mientras que para el test en HD utilizamos un clip de 18 segundos grabado con una Canon Mk II 5D para crear un archivo en 720p. En PovRay se utilizó una imagen de 1024×768 con filtrado antialiasing de 3 muestras y los juegos fueron ejecutados en la configuración que proveyera la mejor calidad gráfica a 1440×900 pero sin filtro de suavizado de líneas ni anisotropía de texturas activadas.

Partimos los benchmarks con problemas al no poder ejecutar las pruebas de Futuremark. Luego de pasar unos minutos con san Google descubrimos que por algún motivo 3DMark y PCMark no se llevan bien con el chipset 785G pero el borrar una DLL o iniciar con el comando -nosysteminfo solucionaría los problemas, lamentablemente no los solucionó en nuestro caso y aunque intentamos realizar las pruebas en Windows 7 para descartar que fuera otro bug feature de Vista pero nuestros esfuerzos resultaron en vano.

Ouch. Al parecer la placa madre nos hace cuello de botella con el 965BE, o al menos así parece luego de ver los aplastantes resultados donde la ECS le gana por paliza a Gigabyte.

En POV-Ray ambas placas se demoran virtualmente lo mismo, por lo que es un empate.

Nuevamente vemos a Gigabyte quedarse atrás, pero esta vez por una diferencia muchísimo más pequeña y casi imperceptible.

Volvemos a tener resultados virtualmente iguales entre ambas placas madre.

Y terminamos la fase de benchmarketing sintético con otro empate. ¿Seguirán igual las cosas con las pruebas de uso real?

Pasamos a una nueva ronda de pruebas y una nueva ronda de problemas. En esta ocasión se trató de COD 5, el cual nos dió una pantalla negra con el chipset 785G a pesar de que utilizamos el último parche y le prendimos velitas a san expedito. De todos modos estos problemas deben ser netamente cosa de drivers, ya que pudimos correr otros juegos a la perfección sin problema alguno.

ECS le conecta un gancho a Gigabyte que la deja tirada en el piso mientras busca los dientes que se le cayeron del golpe. Esperábamos ver una diferencia no tan grande, pero se repite el patrón de que el chipset -o la placa- le hace cuello de botella al procesador.

Definitivamente es demasiado procesador para tan poca placa y vemos un claro ejemplo de lo que podría pasar si armamos un equipo desequilibradamente donde la mitad del presupuesto se va en CPU, un cuarto en gabinete y el resto en los componentes restantes.

Con Photoshop la diferencia no es tan abrumadora y tan sólo medio minuto separa a ambas placas, por lo que no es una opción terrible para una estación de diseño gráfico ultrabarata.

Vemos una leve ventaja en la ECS, pero en este caso podemos atribuirla  fácilmente a los 200 MHz de diferencia entre ambos IGP, nada que un poco de overclock no solucione.

Nada cambia en Mirror’s Edge y vemos nuevamente la mínima ventaja que le lleva el 790GX al 785G.

Bastante impresionantes los resultados en Borderlands si consideramos que es un juego de este año construido sobre un motor que ama los gráficos NVIDIA.

Estamos ante nada más ni nada menos que una placa Gigabyte, por lo que no podíamos esperar menos. Con tan sólo subir en una unidad el multiplicador y darle algo de empuje al bus nos acercamos a los 3.9 GHz sin problemas de calor ni nada similar, por lo que esta placa tiene futuro entre overclockeros de bajo presupuesto.

La Gigabyte MA785GPMT-UD2H es una de esas placas que quieres que te gusten sin importar qué ocurra, por lo que ver  los duros resultados versus una placa de una gama superior de una marca con la que -personalmente- me llevo pésimo es difícil de asimilar, pero cabe recordar que esta placa no está destinada al segmento alto de la sociedad e incluso AMD promueve el chipset 785G con procesadores Phenom II x2 o un amigable Athlon II x4. Dejando eso de lado tenemos los problemas con las tarjetas de video de largo descomunal, pero los únicos motivos por los que le meterías una VGA del porte de un buque (literalmente) a la placa es porque eres demasiado tacaño como para comprar una tarjeta de video a la altura del resto de tu hardware, no sabes (o te asesoraron mal) armar un buen PC o realizas reviews para uno de los sitios más cachilupi del Internet.

De cualquier modo la calidad de la placa madre, la solidez de esta y por sobre todo su atractivo esquema de colores y atención a los detalles la hacen ideal para un HTPC, un equipo de oficina o simplemente para armarle un PC a tu familia o polola que pasa todo el día en Facebook y messenger. ¿Recomendaría este producto a otra persona? Siempre y cuando se le acompañe de hardware de gama media hacia abajo y sea improbable que quien la compre actualice su procesador en el mediano plazo, de lo contrario les sugeriría otra opción.

Si ya tenías una placa con gráficos Radeon HD3300 no vale la pena actualizarse a menos que necesites desesperadamente el soporte para DX10.1 o UDV2. En rendimiento 3D ambos IGP andan parejo, por lo que mejor gastas lo que invertirías en placa madre en una tarjeta de video de gama media o similar.