Muchos reclaman contra el futuro de la PlayStation 3 de Sony diciendo que el valor de ella y la incorporación de la tecnología Blu-ray sólo conducirán a la consola al fracaso, debido a que la gente preferirá la competencia frente a la solución de la Compañía japonesa. Sin embargo, los números reales se verán con el paso del tiempo y es ahí donde las verdaderas y fidedignas conclusiones podrán ser sacadas. Por mientras, y a pesar de todo, han estado circulando algunas estadísticas iniciales en el país de origen de la PS3 y los resultados son bastante peculiares.
Luego de un mes de ventas en Japón, la PlayStation 3 de Sony ha sobrepasado a la XBOX 360 de Microsoft «cementando» un tempranero segundo lugar en la llamada «guerra» de las consolas de la nueva generación.
Si bien, la Wii de Nintendo se encuentra firme en la punta luego de sus 400,000 unidades vendidas durante la primera semana a partir del lanzamiento, la situación de la XBOX 360 es radicalmente distinta siendo preferida por 180,000 usuarios durante su primer año en el mercado. La PS3 recientemente sobrepasó esta barrera y ya le lleva una ventaja al producto de Microsoft de alrededor de 10,000 unidades según lo reportado por Spong.
A pesar de lo anterior, igual Microsoft tiene razones para estar contenta en el país asiático. La semana pasada lanzó al mercado su nuevo RPG llamado Blue Dragon, el cual llevó a los japoneses a hacer largas filas fuera de las tiendas para comprarlo, o el combo con Hardware incluido.
El otro actor de esta guerra, Nintendo, por medio de su división americana (Nintendo América), acaba de entregar una declaración en la cual se detracta de sus dichos anteriores en los que indicaba que vendería un millón de consolas Wii en USA antes de fin de año.
De acuerdo a GameDaily, el brazo estadounidense del gigante japonés aconsejó al medio ignorar las recientes declaraciones que indicaban,
«A pesar de la escasez en algunos lugares, más de un millón de sistemas estarán disponibles en los Estados Unidos a fin de año.»
Con lo anterior, muchos gamers han quedado con el «alma en un hilo» al no saber si recibirán su consola en Navidad.