Muchas veces les hemos comentado que el fascinante mundo de la Computación se mezcla con muchas otras áreas del quehacer humano, lo cual obviamente lo hace mucho más interesante. Una de esas áreas, que se beneficia directamente de la Computación y la automatización, es la Industria automotriz, sector del cuál les hemos contado, anteriormente, una serie de noticias. La que ha continuación les presentaremos, no se relaciona directamente con los procesos de fabricación de los automóviles, sino que con el espectacular mundo de las carreras de Formula Uno, las cuales son laboratorios prácticos para probar nuevas tecnologías.
El mundo de la Formula Uno, se está preparando para una guerra de SuperComputadores. Luego que AMD entró a este campo de la alta velocidad, aliándose con Ferrari y posteriormente con FIA, los SuperComputadores empezaron a transformarse en algo de cada día, apoyando a una actividad en la cual una milésima de segundo muchas veces determina la diferencia entre la victoria y la derrota.
Hoy en día, los SuperComputadores están presentes en el cuartel general de Ferrari en Maranello, Italia (AMD Opteron), en BMW.Sauber en Hinwill, Suiza (Intel Xeon), en Toyota en Köln, Alemania (Itanium 2) y ahora, recientemente, AT&T WilliamsF1 acaba de introducir un SuperComputador sin nombre, el cual se ubica en el puesto número 125 en las Tablas de SuperComputadores de Top500.org.
El Computador fue desarrollado por Lenovo y fue puesto en operación el 17 de Julio pasado. El equipo se encuentra ubicado en las dependencias de simulación de túnel de viento de WilliamsF1 en Grove, Blighty, en Inglaterra. La máquina calculará complejos modelos denominados CFD o «Computational Fluid Dynamics» («Dinámica de Fluidos Computacional«), para efectos de calcular la configuración aerodinámica óptima para los autos del equipo.
El sistema, más de cuatro veces más poderoso que los Computadores existentes, es capaz de entregar un poco menos de 1 TFLOPS de capacidad computacional.
Gracias al dispositivo de Lenovo, el equipo de WilliamsF1 espera acelerar su proceso de simulación aerodinámica en cerca del 75%.