Guía Modding de rejilla para ventana

Ayer me recorrí todo Valdivia buscando metal perforado para hacer un arreglo como los de las fuentes coolermaster, pero no encontré nada.

La mejor anécdota fue que al ira un deposito de chatarra, encontré un rollo de metal perforado muy pero muy bueno, el problema es que pesaba 8 toneladas y estaba bajo otras 20 toneladas de fierro…eso no iba a resultar asi que concluí que la tarde de ayer fue una perdida de bencina y tiempo. Al volver a mi casa se me ocurrió que no todo estaba perdido y volví al centro (esta vez a pata) y encontré lo que buscaba: Una alternativa barata, original y estéticamente interesante para reemplazar el acrílico de mi ventana (luego la verán).

Este es nuestro paciente, conocido como el «mostro verde» tiene un silent cat de 92mm en la ventana, la ventana tiene un sticker que me gusta mucho, pero no estará ahí por mucho tiempo, básicamente lo que pasa es que me carga el acrílico.

La lata

Al sacar la tapa del gabinete y ponerla sobre nuestro mesón de trabajo empezamos a evaluar que cosas deberemos sacar para no dañar nada (la idea es no dañar el acrílico, por si las moscas).

Uno de los tornillos que tenemos que sacar, son 8 en total.

También tenemos que sacar los tornillos que están en el silent cat, ya que afirman al ventilador y al acrílico

Una vez fuera el acrílico lo vemos por última vez antes de de guardarlo en el cajón de los recuerdos.

Ahora tenemos la lata sola y lista para empezar a trabajar.

La malla

Ahora les cuento el secreto: «malla de jardín», cuesta solo 900 pesos el medio metro, pero nosotros necesitaremos la mitad de eso, así que en realidad el mod cuesta solo 450 pesos 😀

Ahora ponemos la lata sobre la malla plástica para ver como se ve, la verdad es que no me deja 100% contento, pero la verdad es que me agrada más que el acrílico

Ahora lo vemos por el otro lado para ver cuanto es lo que nos sobra, lo cortamos con una tijera de cocina, la verdad es que el plástico se corta súper fácil.

Ahora que ya tenemos dimensionado el plástico al tamaño adecuado empezamos a cranear el paso siguiente…. mas cortes….

Empiezo a cortar al centro (hoyo para el ventilador), cuidando que no corte de más o de menos, esta es la tarea mas complicada, pero cualquier niño de 10 años probablemente lo hará más fácilmente que yo.

El relleno

Ahora veremos con que rellenaremos el hoyo para ventilador, de casualidad justo alguien se acordó de mí para mi cumpleaños. La grilla que ven, es 100% hecha a mano por el maestro artesano Shinji, el cual no se puso muy contento al saber que la grilla la tengo yo (que no era el destinatario original de). Demás esta decir los excelentes cortes, un acabado casi perfecto (si fuera perfecto perdería su gracia de «hecho a mano»). Cristian, te felicito por tu trabajo, realmente una gran grilla. Pueden comprar además grillas hechas por el en el catálogo, o hablar directamente con el a través del foro para contratar trabajos de modding 🙂

Otro material esencial son los tornillos adecuados para instalar un ventilador, estos los robé de alguna fuente de poder de por ahí.

Lo otro necesario es un ventilador, el cual también era parte de mi regalo de cumpleaños (cabros, me encantó el regalo), el único detalle es que el color es medio mamón, pero a caballo regalado…

La verdad me salté un par de fotos, el montaje es súper simple y el resultado preliminar es mas que aceptable.

Ahora va la otra parte, como hacer que la rejilla quede fija, para eso utilicé cola caliente y cinta adhesiva por ambos lados, con eso logré que quedara fija en su posición y que no se moviera hacia ningún lado

Ahora el trabajo ya está terminado y solo falta conectar el ventilador.

Finalmente

Ahora una vez que lo montamos en el «mostro verde» me siento mucho mejor, el resultado me encanta.

Trabajo terminado, se ve bien, no suena nada, el calor del interior sale libremente y lo mejor de todo es que me queda material para hacer lo mismo con otro computador.

Bonus track:

Miren los nuevos stickers de mi tarro:

– 100% sticker de la morgue
– El sticker Corsair que Marcelo me había prometido en el verano al fin llegó (3 meses después)