Una de las cosas más notables de la tecnología es que no se requiere ser un experto en cierta área para tener el ingenio de crear algo que ponga en jaque a años de estudio y desarrollo. De hecho, la mayoría de los más grandes descubrimientos del hombre se han producido producto de ideas muy singulares o detalles específicos que han permitido avanzar a la humanidad. Y estos detalles, pueden provenir de un hombre de ciencias de renombre o de un «novato» del sector.
Un estudiante graduado de la Universidad de Texas, ha creado un dispositivo de bolsillo, operado con baterías, capaz de replicar las cadenas de ADN (Acido DesoxirriboNucleico, principal componente del material genético de la inmensa mayoría de los organismos).
El instrumento portátil, con un costo en materiales de $10 dólares, puede crear copias exactas del ADN en sólo 20 minutos. Lo increíble es que si esto se compara con los equipos de laboratorio actuales destinados al mismo fin, los cuales cuestan miles de dólares, el tiempo para generar las replicas alcanza varias horas.
«La novedad del año, a sólo $10 dólares»
De acuerdo a un artículo de la revista New Scientist, la habilidad de generar billones de copias en forma rápida y económica, podría revolucionar el sector de la Salud en países en vías de desarrollo, donde este tipo de tecnología es demasiado costosa para masificarse. El proceso de replicar cadenas de ADN usando reacciones en cadena de polimerasa («polymerase chain reactions» o «PCRs«) es muy útil para llevar a cabo pruebas tales como el diagnóstico y monitoreo de enfermedades como el SIDA, Tuberculosis y Cáncer.
El dispositivo creado por el estudiante Nitin Agrawal opera mediante un principio similar al de la conocida lámpara de lava para relajación, de acuerdo al jefe del proyecto, Víctor Ugaz, un Profesor asistente de Ingeniería Química. El proceso requiere calentar y enfriar un fluido que contenga una muestra de ADN a temperaturas muy precisas, desencadenando la separación, re-formación y luego réplica del material genético. El dispositivo de Agrawal ubica el fluido en una bobina metálica, con varias secciones calentadas a las adecuadas temperaturas. El fluido sube en la bobina a medida que se calienta, luego cae a medida que se enfría volviéndose más denso y pesado.
El invento fue publicado en la edición del mes de Abril (el día 30), de la revista académica de la Universidad.