Nuestro mundo no está fuera de riesgo de catástrofes internas, pero tampoco lo está de accidentes que provienen del espacio exterior. En efecto, el choque de un meteorito con nuestro planeta hasta ha sido llevado a la pantalla grande, situación que asusta a más de alguno. Lo cierto es que para el caso puntual de los ya mencionados meteoritos, nuestra Tierra está constantemente bombardeada por este tipo de cuerpos, la mayoría de los cuales se desintegran al entrar en contacto con la atmósfera y por supuesto con el roce asociado a ella. Pese a lo anterior, puede darse el caso que uno de ellos pueda impactar sobre la superficie terrestre, situación que ocurrió pocos días atrás en nuestro país vecino, Perú, y que generó un misterio entre la comunidad científica.
Un significativo evento cósmico ocurrió el 15 de Septiembre pasado, cuando un masivo meteorito impactó en las afueras de una aldea peruana, Carancas, cerca del lago Titicaca. El meteoro creó un imponente cráter de 8 metros de profundidad y 26 metros de ancho. De manera inmediata se afirmó que el objeto era un meteorito del espacio y no algo de origen terrestre.
«El cráter que quedó producto del impacto del meteorito»
Hasta ese momento, todo era relativamente «normal» si así puede llamarse. Sin embargo, de forma casi inmediata, el cráter empezó a emitir extraños gases que violentamente enfermaron a 30 aldeanos con dolores de cabeza y nauseas. El número exacto de afectados no está claro ya que se habló de 30 a 200. Las especulaciones de un origen «extraterrestre» de esta enfermedad llenaron de preocupación a las autoridades y comunidad científica.
La policía bloqueó el cráter y los aldeanos fueron transportados a hospitales. El Ministro de Salud del Perú, Jorge Lopez, indicó que ninguno de los pacientes se encontraba en estado grave, pero que todos debían someterse a pruebas de sangre y neurológicas, por precaución, en los siguientes 3 a 6 meses.
Inmediatamente los investigadores intentaron estudiar el origen de la enfermedad pero, se toparon con explicación mucho más «terrenal» al fascinante misterio. Lo verdadera causa era agua subterránea mezclado con arsénico.
De acuerdo a Luisa Macedo, una investigadora del Instituto de Geología, Metalurgia y Minería del Perú («INGEMMET«), quién visitó el lugar del impacto, la reacción de los aldeanos se debió a la inhalación de gases de arsénico.
El suelo peruano es rico en depósitos de arsénico y cuando el meteorito golpeó la superficie, columnas de vapor fueron creadas por el calor del objeto. Este vapor llevaba consigo partículas de arsénico causando los problemas en los aldeanos.
Los pobladores describieron el evento como una experiencia aterradora sobre todo al aparecer la tremenda bola de roca roja, por las llamas, cayendo del cielo e impactar levantando una gran cantidad de material particulado y desechos que incluso llegaron a viviendas ubicadas en las cercanías.
Si bien la explicación al problema médico era absolutamente «terrestre», el evento es sin duda alg
una de importancia en términos cosmológicos debido que corresponde al impacto de un objeto de un tamaño no visto en los recientes años.