Durante el desarrollo de Windows Vista, la relación entre la Compañía de Gates y las empresas dedicadas al sector de la seguridad computacional, no fue del todo buena. En efecto, existieron muchos motivos, siendo el más importante el hecho que, según estas Empresas, Microsoft no permitió el trabajo de ellas sobre Vista para poder ofrecer mejor seguridad a un Sistema que, según el gigante del Software, es prácticamente infranqueable. Luego del lanzamiento del SO, las relaciones tampoco han mejorado mucho.
Si bien Microsoft anda pregonando todos los beneficios de la seguridad de Windows Vista, el CEO de Symantec, John Thompson, no está del todo convencido de ello. CNET News le consultó a Thompson si él había instalado Vista, a lo cual replicó,
«No, no lo he hecho. No veo la necesidad de hacerlo para el uso que le doy online en la actualidad.»
Además, Thompson añadió que Symantec todavía no se había resuelto a migrar a Vista.
Con todas las funciones de seguridad de Windows Vista, muchos se preguntarán porqué el jefe de una Compañía dedicada a la seguridad computacional no está interesado en analizar aquello que ha sido publicitado como el SO más seguro del mercado hoy en día.
Según Thompson,
«Los consumidores no deben confundirse. Vista no es una solución de seguridad. Vista es un sistema operativo y Vista entrega algunos avances muy importantes desde el punto de vista de Microsoft y de la Industria, para diseñar una plataforma de operación más segura, confiable y estable, pero las personas todavía requieren de la eficacia que viene en los productos que Symantec y otros diseñan, y por lo tanto nosotros no debemos confundirnos por la retórica de marketing que pretende decirnos lo que Vista es.»
Durante la entrevista, al CEO de Symantec se le argumentó que algunos de los principales productos de su Compañía, entre los que destacan sistemas de búsqueda de virus y firewalls, cuentan con tecnología de defensa obsoleta. Frente a esto, Thompson respondió,
«Es un poco irresponsable decir que están obsoletas. Las cerraduras fueron inventadas, para las puertas de las casas en las cuales muchos viven hoy, hace hartos años atrás. Ellas ya no son la última línea defensiva pero si la primera, y las personas todavía compran cerraduras más avanzadas, y por lo tanto más antivirus y más firewalls.
Debemos ser inteligentes al entregar nuevas capacidades y funciones para una defensa proactiva, en oposición a una defensa reactiva, pero uno también deberá superponer otros tipos de tecnologías para que se encarguen de nuevas amenazas en relación a la administración de fraudes e identidades y todo lo asociado a ello.»