Intel y Micron, a través de su sociedad manufacturera Intel-Micron Flash Technologies ( IMFT) han comenzado el envío de muestras de sus próximos chips de memorias NAND Flash fabricados con una avanzada tecnología de 25nm, cumpliendo así la promesa hecha en el anuncio de Febrero de este año cuando anunciaron la producción de estos chips bajo dicho proceso tecnológico.
Los primeros chips que comienzan su etapa de muestreo (sampling), son chip de 8GB (64Gb), del tipo MLC (Multi-level Cell), que miden físicamente tan sólo 167mm2 (comparado con los 172mm2 de los chips a 34nm) y pueden ser integrado en múltiples dispositivos como cámaras digitales, cámaras de video, smartphones, reproductores de música, unidades SSD (Solid State Disk), entre otras aplicaciones. De hecho Intel planea introducir nuevas unidades SSD basados en estos chips a 25nm en la segunda mitad de este año, los cuales vendría a tomar el relevo de las actuales unidades basadas en chips de 34nm.
La ventaja de un proceso de manufactura tan reducido, es que incluso se obtiene un chips con menor dimensión física que uno fabricado a 34nm por ejemplo, pero a su vez se incrementa la densidad de datos, logrando un chips que con mayor capacidad, así por ejemplo un chip flash de 8GB fabricado a 25nm, ocupa un menor espacio físico que uno de 4GB fabricado a 34nm, lo que va en directo beneficio de los dispositivos que incorporen este tipo de chips, sobre todo en esta tendencia a la miniaturización de los dispositivos.
La tecnología utilizada por Intel y Micron para desarrollar estos chips no es otro que el conocido método de litografía de inmersión liquida (también utilizada por AMD para fabricar sus procesadores a 45nm). Otras ventajas de un proceso reducido de manufactura, es el consumo, la fiabilidad del chip en el tiempo, y las tasas de transferencias.
Intel espera ofrecer unidades SSD de 600GB, 300 y 160GB a finales de este año, los cuales estarán basados desde luego en estos nuevos chips de 25nm.