Google tiene un problema muy grande: Está perdiendo empleados clave a un ritmo desmesurado. El quedarse sin sus programadores, ejecutivos o cocineros estrella sin duda le quita competitividad a Google, por lo que desarrollaron un algoritmo capaz de entregar la tendencia a renunciar que tienen sus empleados y quienes se sienten inútiles dentro de la compañía en base a cuestionarios y reportes hechos por sus compañeros. Al igual que la fórmula de Coca-Cola, Google indicó que es un secreto y no dieron más detalles al respecto. Claro, Google le está dando un buen uso para evitar tener empleados que renuncien, pero cada vez nos acercamos más a un mundo donde un viernes a las 5 de la tarde llegará tu jefe y te dirá «lo siento, me caes bien pero el PC dice que debo despedirte». Será el futuro de los matrimonios perfectos gracias a la ayuda de Google? [DailyTech]